La función de ensamblaje bajo pedido consiste en mantener un stock de los componentes necesarios para ensamblar un producto final y solo realizar el ensamblaje una vez que se recibe el pedido. En el ámbito de la logística y la gestión de la cadena de suministro, esta estrategia ayuda a las empresas a reducir sus costes de inventario y, al mismo tiempo, a ofrecer soluciones personalizadas a los clientes.
Aumenta la eficiencia al centrarse en los componentes listos para ensamblar, lo que acelera la producción y reduce los plazos de entrega. El proceso ATO permite a las empresas mantenerse flexibles y responder a las demandas de los clientes y, en última instancia, mejorar el rendimiento de la cadena de suministro y la satisfacción del cliente.