Un CEP captura información clave sobre las mercancías entrantes, como los detalles del envío, los niveles de inventario y las instrucciones de manipulación, cuando entran por primera vez en la cadena de suministro. Luego, esta información se usa para dirigir las mercancías a través de los canales apropiados para su almacenamiento o envío inmediato.
Al administrar el CEP de manera eficiente, su empresa puede reducir cuellos de botella, mejoran la precisión del stock y garantizan tiempos de procesamiento más rápidos. Este proceso simplificado puede mejorar directamente el rendimiento general de sus operaciones logísticas, haciendo que su cadena de suministro sea más eficiente y rentable.