La logística integrada se refiere a la gestión integral de las operaciones de la cadena de suministro, en la que diferentes funciones logísticas, como el transporte, el almacenamiento y la gestión del inventario, se coordinan como un sistema unificado para agilizar las operaciones.
La logística integrada implica combinar varias funciones y servicios logísticos en un sistema único y cohesivo que permite un mejor control, eficiencia y rentabilidad. Este enfoque lo integra todo, desde el abastecimiento y el transporte de los productos hasta la entrega final, lo que proporciona a las empresas una visibilidad de principio a fin. Al optimizar cada fase de la cadena logística, las empresas pueden lograr operaciones más fluidas y tiempos de respuesta más rápidos.
La logística integrada es esencial porque ayuda a las empresas a reducir las ineficiencias y optimizar sus cadena de suministro, y mejorar la prestación general de servicios. Al gestionar el flujo de mercancías a través de un único punto de coordinación, las empresas pueden evitar demoras, minimizar los costos de inventario y mejorar la capacidad de respuesta.
Por ejemplo, un comercio electrónico la empresa que adopta una logística integrada puede sincronizar el procesamiento de sus pedidos, almacenamiento, y la entrega de última milla, lo que garantiza que los clientes reciban sus pedidos de manera más rápida y confiable. Esto no solo aumenta la satisfacción del cliente, sino que también mejora la eficiencia operativa.